Por Germán Ferrás Álvarez
Corresponsal jefe en Rusia
La propuesta del mandatario en esencia estriba en considerar la agresión de un estado no nuclear con la participación de otro nuclear como su ataque conjunto contra el territorio ruso.
Por lo tanto, Rusia se reservará el derecho a recurrir a las armas nucleares en caso de una agresión contra ese país o contra Belarús, incluso si el enemigo crea una amenaza crítica, utilizando armas convencionales, declaró Putin durante una reunión extraordinaria del Consejo de Seguridad de la nación eslava.
El mandatario recordó que todas estas cuestiones han sido acordadas con la parte belarusa, y aseguró que la triada nuclear sigue siendo la garantía más importante de la seguridad del Estado y de los ciudadanos, “una herramienta para mantener la paridad estratégica y el equilibrio de poder en el mundo.”
Asimismo, enfatizó que “el uso de fuerzas nucleares es una medida extrema para proteger la soberanía del país.”
Las condiciones para la transición de Rusia al uso de armas nucleares también están claramente fijadas. Consideraremos tal posibilidad ya cuando recibamos información fiable sobre el lanzamiento masivo de medios de ataque aeroespacial y su cruce de nuestra frontera estatal.
Putin se refirió en específico a aviones estratégicos o tácticos, misiles de crucero, drones, aviones hipersónicos y otros.
El mandatario aseguró que las aclaraciones sobre los fundamentos de la política estatal en el ámbito de la disuasión nuclear están calibradas y en consonancia con las amenazas y los riesgos militares contra Rusia.
Al mismo tiempo, destacó que Rusia siempre se ha esforzado por impedir la proliferación de armas nucleares y sus componentes.
“Siempre hemos adoptado un enfoque muy responsable respecto a estas cuestiones, muy conscientes del poder colosal de estas armas, tratando siempre de reforzar la base jurídica internacional para la estabilidad mundial, para evitar la propagación de las armas nucleares y sus componentes”, destacó el líder ruso.
UNA CLARA SEÑAL PARA OCCIDENTE
Las propuestas expresadas por el presidente para cambiar las condiciones para el uso de armas nucleares pueden considerarse revolucionarias: en caso de un ataque de Ucrania con el apoyo de Estados Unidos u otra nación, Rusia podrá utilizar armas nucleares, destacó el experto militar, Andrei Klintsevich.
Para el director del Centro de Estudios de Conflictos militares y políticos, Putin anunció cambios muy serios. Incluso se les puede llamar revolucionarios. Lo más probable es que se transforme la composición de las fuerzas rusas de disuasión nuclear, que significan además una clara señal para occidente.
“Estamos hablando de complejos estratégicos y tácticos, es decir, se aumentará el número de portaaviones y ojivas, así como se ampliarán los objetivos a los que se dirigirán”, afirmó Klintsévich.
De hecho, se habla de reducir el umbral para el uso de armas nucleares. Antes sólo existía la opción para tomar represalias, pero para lanzar un ataque nuclear se formularon criterios cualitativamente diferentes, añadió.
En términos relativos, cuando Ucrania ataca con el apoyo de los estadounidenses o con la ayuda de armas que le han sido transferidas, ya podemos actuar y atacar, lo que puede considerarse una aclaración seria.
Sin embargo, todavía tenemos que saber exactamente qué cambios se plasmarán finalmente en el papel. Sin embargo, creo que Moscú ha enviado una señal muy seria a Occidente de que no pretendemos bromear en materia de seguridad. Los ejercicios en curso y los cambios introducidos en el documento doctrinal son sumamente significativos, agregó el experto.
Más adelante refirió que Putin recordó que durante el año pasado, especialistas del Ministerio de Defensa, el Ministerio de Asuntos Exteriores, el Consejo de Seguridad y otros departamentos realizaron un análisis profundo y exhaustivo y evaluaron la necesidad de ajustar los enfoques rusos ante el posible uso de fuerzas nucleares.
Basados en ese anàlisis, se propuso hacer una serie de aclaraciones sobre la determinación de las condiciones para el uso de los sistemas estratégicos y tácticos disponibles para Rusia.
Así, el borrador amplía la categoría de estados y alianzas militares contra los cuales se lleva a cabo la disuasión nuclear. En la versión actualizada del documento, se propone considerar la agresión contra Rusia por parte de cualquier Estado no nuclear, pero con la participación o el apoyo de un Estado nuclear, como su ataque conjunto contra la Federación de Rusia.
También se establecen claramente las condiciones para la transición de Moscú al uso de armas nucleares: esta posibilidad se considerará cuando se reciba información confiable sobre el lanzamiento masivo de armas de ataque aeroespaciales y su cruce de nuestra frontera.
Además, Rusia hace uso del derecho a utilizar armas nucleares en caso de agresión contra Belarrùs como miembro del Estado de la Unión, así como si el enemigo, con armas convencionales, crea una amenaza crítica a la soberanía de Rusia.
CAMBIOS QUE MOTIVAN REFLEXION EN OCCIDENTE
Los cambios propuestos en la doctrina nuclear rusa son un motivo de reflexión tanto para Kiev, como para todos los países que empujan al mundo hacia una catástrofe, acotò el secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, Dmitri Medvédev.
El lanzamiento masivo y el cruce de nuestra frontera por medios aeroespaciales de destrucción del enemigo, incluidos aviones, misiles y vehículos aéreos no tripulados, en determinadas condiciones puede convertirse en una razón para el uso de armas nucleares.
Un motivo de reflexión no sólo para el gobierno de Ucrania, y también para todos los enemigos de Rusia que empujan al mundo hacia un desastre, destacó Medvédev.
La decisión de utilizar armas nucleares, subrayó, corresponderá al comandante en jefe supremo, y la situación se evaluará en función de una combinación de factores.
“La agresión contra Rusia por parte de un Estado que no tiene armas nucleares, pero que cuenta con el apoyo o la participación de un país con armas nucleares, se considerará un ataque conjunto. Todos entienden de qué países estamos hablando”, enfatizó Medvédev.
Mientras que para el portavoz del Kremlin, Dmitir Peskov, el anuncio es una señal de advertencia para las naciones hostiles de las consecuencias de su implicación en los ataques a Rusia con diferentes armas, y no necesariamente nucleares.
REACCIÓN OCCIDENTAL
No más conocerse la decisión del mandatario ruso se desató en los medios de prensa occidentales, una cascada de opiniones al respecto, que se tomaron con toda seriedad las propuestas sobre la actualización de los Fundamentos de la política estatal en el ámbito de la disuasión nuclear.
En particular, la mayoría de los medios occidentales llaman la atención sobre el hecho de que “Rusia podrá atacar” a los Estados no nucleares, al enfatizar en que la señal de Rusia se escuchó en Occidente.
El Washington Post consideró que se trataba de una amenaza directa, pero intentó convencer a los lectores de que era “poco probable que las autoridades rusas utilizaran armas nucleares”. Así, el periódico cita las opiniones de analistas que se preguntan “qué se considerará ahora un ataque a Rusia”, y advierten que Occidente será ahora más cauteloso.
El Financial Times indica que tales acciones de Moscú fueron una respuesta directa a las discusiones sobre la posibilidad de ataques ucranianos en territorio ruso con armas occidentales.
La agencia noticiosa Associated Press, a su vez, describió las propuestas de Putin como “una nueva advertencia seria para Occidente”. “El nuevo lenguaje, que prevé la posibilidad de una posible respuesta nuclear a cualquier ataque aéreo, tiene como objetivo convencer a Occidente de no permitir que Ucrania ataque a larga distancia”, indican los medios.
Bloomberg señaló anteriormente que Putin está cambiando su doctrina nuclear para contrarrestar la agresión occidental.