"Esencialmente, el ataque llevado a cabo por Irán el 14 de abril no fue solo un ataque de represalia, sino que estableció un nuevo orden", afirma el especialista en Oriente Medio y África Abbas Juma.
Irán realizó este fin de semana un ataque aéreo al territorio de Israel, en el marco de su operación militar ‘La Verdadera Promesa‘, en represalia por la agresión israelí contra su Consulado en Damasco, Siria. Varios especialistas discutieron sobre si este ataque, en el que participaron más de 300 drones y misiles de diversos tipos, tuvo éxito.
Tel Aviv asegura haber interceptado la inmensa mayoría de los objetivos, alrededor del 99 %, mientras que el resto cayeron en la base aérea de Nevatim causando daños menores a la infraestructura. No obstante, Abbas Juma, especialista en Oriente Medio y África, afirma que fue una operación más exitosa de lo que parece teniendo en cuenta su impacto político y a largo plazo.
Establecimiento de un nuevo orden
“Esencialmente, el ataque llevado a cabo por Irán el 14 de abril no fue solo un ataque de represalia, sino que estableció un nuevo orden. Irán demostró que está dispuesto a recurrir a nuevos medios de influencia en una situación en la que las palabras no son suficientes”, señaló el periodista y comentarista político ruso en un artículo escrito este martes para RT.
En ese sentido, Juma analizó el ataque como “la jugada de un gran maestro en una gran partida de ajedrez” que aún no terminó. De acuerdo con el autor, tras el ataque a la representación diplomática Teherán debía “responder de una manera que pareciera convincente y lograra objetivos militares específicos, pero que no iniciara la Tercera Guerra Mundial“.
Jugada de un “gran maestro” de ajedrez
“Para lograr el primer punto, Irán tuvo que llevar a cabo un ataque directo sin recurrir exclusivamente a fuerzas indirectas, y así fue como actuó. En cuanto al segundo punto, aunque la mayoría de los misiles y drones fueron efectivamente derribados, algunos lograron penetrar el espacio aéreo israelí y alcanzar objetivos militares”, destacó.
“Obviamente, los iraníes no querían iniciar una guerra que involucrara a Estados Unidos, aunque eso era lo que quería [el primer ministro israelí Benjamín] Netanyahu. En otras palabras, Israel no logró provocar a Irán”, agregó.
Debilidades israelíes expuestas
Por otra parte, el analista expresó que el ataque evidenció una vez más que el país hebreo no es invulnerable y que es posible atacarlo. En ese sentido, dijo que la República Islámica tiene un arsenal más potente que no fue utilizado en la operación.
“Sin embargo, incluso los drones y misiles menos avanzados pudieron penetrar el espacio aéreo israelí e infligir daños económicos, ya que Israel gastó mucho más dinero en derribar misiles y drones que el que Irán gastó en lanzarlos“, puntualizó.
Confundir a Israel
Finalmente, Juma opinó que el logro más importante de Teherán fue confundir a Israel de la misma manera que lo estuvo después del ataque de Hamás al territorio hebreo el 7 de octubre de 2023. Según sus palabras, Tel Aviv se enfrenta al interrogante de cómo responder al ataque, teniendo en cuenta que una agresión directa iniciaría una guerra “para la que nadie está preparado, incluido EE.UU“, y que sus continuos ataques a las fuerzas ‘proxy’ iraníes no tienen el resultado deseado.
“La pelota está ahora en el campo de Israel, y el país enfrenta los mismos desafíos que la República Islámica después del 1 de abril [tras el ataque al Consulado iraní en Damasco]. Pero, ¿podrá Israel resolver estos desafíos con la misma eficiencia?”, concluyó.
Fuente: actualidad.rt.com