Este año, Estados Unidos (EE. UU.) ha acelerado a fondo su maquinaria de deportaciones lo que ha causado que a mes y medio de que concluya el 2024, se haya superado ya la cifra de guatemaltecos que deportó en 2023, de acuerdo con registros del Instituto Guatemalteco de Migración (IGM).
Las cifras oficiales indican que en 10 meses y medio han retornado al país 462 vuelos que trajeron de vuelta al país a 55 mil 905 connacionales, entre los cuales se cuentan 4 mil 484 menores de edad. El año pasado, al final de los 12 meses, la cifra de deportados se ubicó en 55 mil 302, producto de 470 vuelos, entre ellos, 10 mil 404 menores.
Esto significa que, de seguir la tendencia, al finalizar el año el número podría acercarse a los 65 mil guatemaltecos deportados. El ritmo promedia 10 vuelos por semana, por lo que en el mes y medio que queda de 2024 podrían arribar otros 60.
De esta forma, el presente año pasará a la historia como el que más deportaciones se han registrado.
NÚMEROS
Los registros del IGM dan cuenta de que, dentro del total de deportados, 7 mil 985 vinieron en unidades familiares. Además, que los departamentos de Huehuetenango, San Marcos, Guatemala, Quiché y Alta Verapaz, son los acumulan la mayor cantidad de guatemaltecos que han migrado y sido devueltos al país.
En total, de estos departamentos vinieron 23 mil 744 personas, el 42%. En cuanto a los municipios la capital registra 2 mil 956 deportados, seguido de Coatepeque, Quetzaltenango (832); las cabeceras de Jalapa (816), Retalhuleu (692, Cobán, Alta Verapaz (690; Escuintla (687) y Jutiapa (754).
Por edades, siguen siendo los jóvenes de18 a 30 años los que más han intentado irse del país en busca de un mejor destino. En total de este grupo etario fueron deportados 32 mil 574 personas, el 58%, seguido del grupo etario de 31 a 40 años, del cual arribaron 13 mil 155, el 23.5%.
En los siguientes rangos de edades los números ya son más bajos. Así, de 41 a 50 años, se registraron 4 mil 640 deportaciones, de 0 a 10, 3 mil 308; de 11 a 17, 1 mil 176; de 51 a 60, 926; de 61 a 70, 118; y finalmente fueron devueltos al país ocho personas de más de 70 años.
ATENCIÓN
La oficina de Comunicación del IGM destacó que, en los centros de recepción de retornados, junto con otras instituciones se le dan servicios de salud, atención psicosocial, alimentación, llamadas telefónicas, seguridad y transportes a aquellos que regresan de EE. UU. “para asegurar un retorno digno para cada guatemalteco que ingresa al país”.
Sin embargo, analistas consideran que no solo se debe atender la llegada de los connacionales que son deportados, puesto que la estrategia debe ir enfocada en generar condiciones de arraigo para que los guatemaltecos decidan quedarse. El problema, coinciden, es que se requieren estrategias que mayormente son del largo plazo.
El número de deportaciones que van en aumento son el resultado, no solo del endurecimiento de las políticas restrictivas a la migración, sino también de que esta ha aumentado desde Guatemala. Diversos estudios detallan que la migración se produce principalmente por factores económicos, la necesidad de reunificarse con los seres queridos y, en menor medida, por la violencia.
Un estudio reciente del Consejo Nacional de Atención al Migrante de Guatemala (Conamigua) dice que “la migración parece estar directamente vinculada con los niveles de pobr3eza e insuficiente de crecimiento y desarrollo socioeconómico”.
Asimismo, cita un estudio de 2022 de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), según el cual, el 85.35% de quienes migran lo hacen por cuestiones económicas, el 1.52% lo hace para enviar remesas.
“En Huehuetenango, la gente que más migra es la que está en condiciones de pobreza y pobreza extrema”, afirma Juan José Hurtado, director de la organización Pop Noj, que trabaja con comunidades indígenas en ese departamento. Agrega que la pobreza se conjuga con la falta de desarrollo y servicios, con comunidades alejadas con carreteras destruidas, y otras en las que ni siquiera tienen servicio de electricidad.
Cuenta que, recurrentemente escuchas historias de personas que se vana EE. UU. y logran llegar con sus familias lo que significa que el número de deportados no se puede traducir en que esa cantidad de guatemaltecos sean los que están migrando.
Hurtado afirma que dependiendo de lo que cueste un viaje irregular así serán las posibilidades de llegar sin novedad hasta el destino planificado. Por tal razón, es probable, que los que son sorprendidos al cruzar la frontera y luego deportados no hay tenido suficientes recursos para costear un viaje más caro.
En Huehuetenango, como suele pasar en muchos departamentos, las personas en condiciones de pobreza muchas veces se ven forzadas a sacar préstamos o vender sus pocos activos que poseen para pagar los viajes. Por esa razón, cuando son deportados, la aflicción es mayor, subraya el director de Pop Noj.
NO SE PERCIBEN RESULTADOS
El entrevistado coincide en que 10 meses es muy poco tiempo para evaluar la gestión de un gobierno, y que a pesar de lo que haga la administración de Bernardo Arévalo “lo visible es muy poco”, con lo que se acentúa la sensación de que los cambios son muy difíciles o que tomarán mucho tiempo.
“A este gobierno se le cuestiona la falta de firmeza y decisión… lo tienen acorralado a la defensiva y eso ayuda a perpetuar la crisis política”, argumentó.
El analista en temas migratorios Fernando Castro consideró “preocupante” el incremento de retornados este año y expuso que la falta de empleo es la principal causa del éxodo de guatemaltecos hacia EE. UU.
“La falta de empleo y de desarrollo en Guatemala, motiva que diariamente miles de migrantes, traten de cruzar el territorio mexicano”, precisó el analista, quien estima que la migración irá en aumento en la medida que se aproxime la fecha del cambio de mando en el gobierno de EE. UU. puesto que el presidente electo, Donald Trump, ha ofrecido endurecer la frontera sur una vez tome posesión del cargo.
“Los gobiernos deben trabajar en forma integral para presentar propuestas de solución y mermar migración con ello la pérdida del recurso humano y las serias consecuencias para los sectores de agricultura, construcción, servicios entre otros por la falta de mano de obra y el encarecimiento de productos”, subrayó Castro.
Fuente: lahora.gt