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De acuerdo con un estudio elaborado por la consultora Agua Consulta, existe la probabilidad de que el fenómeno de La Niña se desarrolle en el país y provoque más lluvias del promedio este año.

Actualmente, Guatemala se encuentra influenciada por los efectos del fenómeno de El Niño y, según los pronósticos más recientes, se prevé que El Niño experimente un debilitamiento gradual en los próximos meses, transitando hacia un estado ENSO-neutral durante el trimestre de abril a junio de 2024.

Además, se observa un crecimiento en las probabilidades de que se desarrolle La Niña en los meses posteriores a la transición a ENSO-neutral. La probabilidad está oscilando entre media a alta.

En términos de comprensión de los fenómenos, se enfatiza que el déficit de lluvia se manifiesta principalmente durante las condiciones de El Niño, mientras que los excesos de lluvia se relacionan con las condiciones de La Niña.

La Niña se produce cuando se registran temperaturas bajas en la superficie del agua del océano Pacífico tropical, es un fenómeno que se repite cada 3 a 7 años. El último fenómeno de La Niña ocurrió en 2019.

PRONÓSTICO PARA GUATEMALA

“Los modelos climáticos globales examinados mensualmente muestran que la mayoría de los meses durante la temporada de lluvias de este año podrían experimentar precipitaciones normales o incluso superiores”, concluyó Claudio Castañón, consultor de Agua Consulta.

Al revisar los modelos globales, Castañón refiere que hay probabilidad de que se produzcan más precipitaciones durante el segundo semestre de 2024, especialmente a partir de los meses de agosto y septiembre.

El informe de la referida entidad destaca que según la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), el Sistema Acoplado Océano-Atmósfera indica que El Niño se encuentra actualmente en una fase fuerte y madura, pronosticando su persistencia hasta mayo 2024.

Es decir que habrá un momento de transición, entre mayo y junio, con condiciones neutras, donde no habrá presencia ni de El Niño ni de La Niña, pero podrían presentarse otros fenómenos.

Castañón indica que «de acuerdo con los pronósticos climáticos, El Niño concluirá entre abril y mayo, justo antes del inicio de la temporada de lluvias en Guatemala. En consecuencia, el déficit de lluvia asociado al El Niño no se espera que sea tan significativo».

Recomendaciones

  • El consultor recomienda a las instituciones planificar para prevenir los efectos de la posible presencia de La Niña. Esto implica coordinar el uso adecuado de los recursos hídricos, inspección del estado de la infraestructura y de los caudales.
  • A las alcaldías, sugiere que se realicen trabajos de limpieza de drenajes a fin de evitar inundaciones.
  • En cuanto a la población en general se aconseja impermeabilizar sus viviendas ante el posible exceso de humedad.

 

En cuanto a la temporada calurosa, Castañón recuerda la necesidad de mantenerse hidratado, evitar la exposición al sol y prevenir cualquier generación de chispas que puedan provocar incendios.

Fuente: lahora.gt

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