Contexto y Detalles de la Detención
En una movida sin precedentes, el Ministerio Público (MP) de Guatemala, bajo la dirección de la Fiscal General María Consuelo Porras, ha solicitado la captura del exministro de Gobernación, David Napoleón Barrientos. La razón detrás de esta medida se centra en la presunta negligencia del exfuncionario al no reprimir a los manifestantes, una acción vista como crucial para poner fin a las protestas que clamaban por la renuncia de la jefa del ente investigador y la eliminación de la judicialización y entorpecimiento de los resultados de las elecciones generales de 2023, que culminaron con la victoria del presidente electo, Bernardo Arévalo.
El hashtag #MPFuerteYFirme ha tomado las redes sociales como un eco del compromiso de la Fiscalía en este asunto. A través de diligencias desarrolladas por la Fiscalía de Delitos Administrativos, se coordinó la aprehensión de Barrientos por posibles delitos de incumplimiento de deberes y desobediencia, según información compartida en el perfil oficial del MP de Guatemala.
Desarrollos Recientes: Allanamiento y Detención
En la mañana del jueves 11 de enero, la Fiscalía de Asuntos Administrativos, encargada de investigar a funcionarios públicos, allanó la residencia del exministro y ejecutó la orden de aprehensión. Esta detención se produce en medio de un cambio de mando y una crisis democrática que ha afectado al país desde julio del año pasado.
Las redes sociales, especialmente Twitter, han sido un escenario crucial para seguir estos eventos. El MP de Guatemala ha compartido actualizaciones frecuentes sobre el progreso de las investigaciones y la detención de Barrientos, reforzando la imagen de un Ministerio Público fuerte y decidido.
Antecedentes: La Resistencia de Barrientos ante las Protestas
El 16 de octubre de 2023, el MP presentó una solicitud ante la Corte de Constitucionalidad (CC) para destituir a Barrientos. La razón: su negativa a utilizar la fuerza pública para liberar los bloqueos carreteros que persistieron como medidas de presión durante semanas en todo el país. Estos bloqueos exigían la renuncia de Porras, acusada de orquestar un intento de Golpe de Estado y utilizar la Fiscalía Especial contra la Impunidad (FECI) para revertir los resultados electorales de 2023.
Horas después de la solicitud, Barrientos presentó su renuncia al presidente Alejandro Giammattei mediante una carta en la que expresaba que ponía a disposición su cargo ante los acontecimientos.
El Debate sobre el Uso de la Fuerza Pública
Barrientos, exministro de Gobernación y titular de Seguridad, se mantuvo firme en su posición de no utilizar la fuerza contra los manifestantes. En una entrevista en julio de 2023, afirmó que todas las dependencias estaban dispuestas a “proteger a los manifestantes” que exigían el respeto a las elecciones generales. Destacó que no había intención de violar los derechos humanos y que creían en formas de mantener el orden público sin recurrir a la represión.
Reflexiones sobre una Crisis Democrática
Los bloqueos que iniciaron el 2 de octubre del año pasado se extendieron a nivel nacional, convirtiéndose en un símbolo de resistencia contra Porras y sus acciones. La Fiscalía, liderada por la misma Porras, acusó a Barrientos de “desobediencia” por no acatar la orden de desalojar los bloqueos en las principales carreteras del país.
Este episodio marca un capítulo crítico en la historia política reciente de Guatemala, revelando tensiones y divisiones que han llevado a la destitución de un ministro y a la detención por posibles delitos administrativos.
Conclusión
La detención de David Napoleón Barrientos no solo es un acontecimiento político significativo sino también un reflejo de las complejidades y desafíos que enfrenta la democracia guatemalteca. La resistencia del exministro ante el uso de la fuerza pública, su renuncia posterior y la conexión con las protestas que buscaban la destitución de la Fiscal General Porras, todo contribuye a una narrativa política convulsa.
Fuente: La Hora
