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Pueblo ubicado en tierras indígenas delimitadas por la Funai ha sido blanco de pistoleros

Pueblo ubicado en tierras indígenas delimitadas por la Funai ha sido blanco de pistoleros
Pueblo ubicado en tierras indígenas delimitadas por la Funai ha sido blanco de pistoleros

Cuatro indígenas de la etnia Ava Guaraní, entre ellos un niño y un adolescente, fueron baleados en un nuevo ataque de sicarios a la comunidad Yvy Okaju (anteriormente llamada Y’Hovy), ubicada en Guaíra (PR) . El ataque se produjo alrededor de las 21 horas del viernes (3). Fue el cuarto reportado por los indígenas en los últimos siete días.

Según líderes comunitarios, al menos cuatro hombres armados y encapuchados ingresaron a la comunidad y se dirigieron a la casa del indígena. Vinieron disparando.

Un niño de 7 años recibió un impacto en el pie; el adolescente, en la pierna; Los dos adultos fueron golpeados en la espalda y en la barbilla.

Todos los heridos fueron trasladados al Hospital Bom Jesus, en Toledo (PR). Imágenes difundidas por los indígenas muestran que la herida del joven con un disparo en el mentón es grave, pero que no corre riesgo de muerte.

Los indígenas informaron que los sicarios llegaron a la comunidad por un camino que, en ese momento, no estaba siendo vigilado por la Fuerza Nacional. Desde noviembre, según lo determinó el Ministerio de Justicia, la fuerza federal debe proteger a los indígenas.

En audios enviados por los Ava Guaraní luego del ataque, reportan estar rodeados de sicarios y piden acciones a las autoridades.

“Por amor de Dios, estamos rodeados. Realmente rodeado. Rodeado de pistoleros. Estamos pidiendo ayuda”, dice un indígena. “Si la policía no actúa, no sabemos cuántos de nosotros nos veremos afectados”.

“Realmente estamos siendo atacados”, dice otro indígena. “¿Alguien lo creerá? ¿Hasta cuándo dirán que fue sólo un petardo? Estamos cansados ​​de todo esto. Estamos cansados ​​de ver que incluso a los niños les disparan”.

Esta Ava Guaraní dijo que las autoridades han guardado silencio hacia los indígenas. Se quejaron de que el municipio de Guaíra trata a los indígenas como “terroristas”. La Fuerza Nacional, por su parte, dice que son atacados con cohetes cuando les disparan. “Estamos a merced de toda esta violencia. Vivimos en la era de la pólvora, la era de la bala”.

Terreno identificado

La aldea atacada es una de las que fueron retomadas por los Ava Guaraní y forma parte de la Tierra Indígena (TI) Guasu Guavirá . Ya identificado y delimitado por la Funai en 2018, el TI está superpuesto por 165 explotaciones.

Sin embargo, durante los últimos ocho años el proceso de demarcación se ha estancado. Cansados ​​de “las promesas vacías de los blancos”, como lo definió uno de los líderes, el 5 de julio los indígenas realizaron siete ocupaciones dentro de su territorio tradicional. Desde entonces, el conflicto se ha intensificado. El 27 de agosto también se instaló un campamento de no indígenas en la zona con el objetivo de intimidar a los ava guaraní restantes.

En los últimos siete días, otros tres ataques se saldaron con un hombre baleado en el brazo, una mujer con una quemadura en el cuello, dos casas y plantaciones incendiadas, además de disparos de armas de fuego y lanzamiento de bombas contra la tekoha. (el lugar donde está la gente, en guaraní) Yvy Okaju. El lunes (30), un día después de uno de los ataques, la Policía Federal acudió al lugar y recogió al menos 13 cápsulas de munición calibre 38.

Fuerza Nacional

Ante el aumento de la violencia contra los pueblos indígenas, principalmente los Ava Guarani en Paraná y los Guarani Kaiowá en Mato Grosso do Sul, el gobierno federal publicó en noviembre la Ordenanza n.º 812, que autoriza el uso continuado de la Fuerza Nacional en zonas de conflicto . La actuación, sin embargo, ha sido criticada por los indígenas.

En una asamblea Ava Guaraní celebrada en noviembre, el pueblo indígena publicó una carta informando sobre las amenazas de ataques contra la comunidad Yvy Okaju a finales de año. “Si nuevamente hay derramamiento de sangre Ava Guaraní, todas las autoridades competentes tendrán la culpa de no haber hecho nada”, advirtieron.

El Ministerio de Justicia informó que agentes de la Fuerza Nacional acudieron a la comunidad atacada luego de ser alertados del nuevo ataque el viernes. También informó que determinó un aumento del 50% del personal de la Fuerza en la zona. “El refuerzo está en marcha y estará en pleno funcionamiento este sábado”, declaró.

Según el Ministerio, la Policía Federal abrió una investigación para identificar a los autores del tiroteo. “Ante el riesgo de nuevos ataques, se activaron equipos de preparación y alerta para intensificar el patrullaje en la zona”, añadió.

Equipos de la Guardia Municipal de Guaíra y de la Fundación Nacional de los Pueblos Indígenas (Funai) también apoyan acciones de protección y seguimiento.

“El MJSP reafirma su compromiso con la mediación pacífica y la prevención de conflictos. Las acciones adoptadas ya han restablecido el orden y se están tomando medidas preventivas para evitar la escalada de tensiones”, concluyó.

El gobierno de Paraná encargó al gobierno federal la solución de los conflictos agrarios en el estado. “En octubre, el gobernador Carlos Massa Ratinho Junior envió una carta al presidente Luiz Inácio Lula da Silva exigiendo una posición de la Unión al respecto. El gobernador expresó a la Presidencia de la República la urgente necesidad de una acción más fuerte de las autoridades públicas para garantizar la seguridad de la población de Paraná”, afirmó.

Respecto al ataque del viernes, el gobierno de Paraná dijo que apoya las investigaciones realizadas por la Policía Federal. “Se movilizaron fuerzas estatales para reforzar la seguridad en la región, en alineación con el accionar de las autoridades federales, quienes tienen la responsabilidad constitucional de investigar y prevenir delitos en tierras indígenas”, declaró.

Al ser contactado, el Ayuntamiento de Guaíra no respondió.

La Articulación de los Pueblos Indígenas de Brasil (Apib), la Comisión Guaraní Yvyrupa (CGY), la Articulación de los Pueblos Indígenas del Sur de Brasil (Arpin Sul), la Articulación de los Pueblos Indígenas del Sudeste (Arpin Sudeste) y la Indígena Misionera El Consejo (Cimi) publicó una nota condenando los ataques criminales y criticó “las acciones del gobierno federal son absolutamente ineficaces, si no inertes; de hecho, el gobierno Parece intimidado.”

Demarcación bloqueada

Ubicada en las ciudades de Guaíra, Terra Roxa y Altônia, todas en Paraná, la TI Tekoha Guasu Guavirá tiene 24 mil hectáreas. Después de la delimitación por parte de la Funai, el proceso de demarcación fue detenido por una acción de los ayuntamientos de Guaíra y Terra Roxa aceptada en primera instancia por el Tribunal Federal.

La continuidad de la regularización del territorio depende de una decisión final del Tribunal en tribunales superiores. Esto, sin embargo, también queda suspendido hasta que el Supremo Tribunal Federal (STF) decida sobre la validez o no de la Ley Marco Temporal. Aprobada en septiembre de 2023, la tesis ruralista determina que sólo se podrán demarcar tierras ocupadas por indígenas hasta el 5 de octubre de 1988, fecha de promulgación de la Constitución.

El relator de las acciones es el ministro Gilmar Mendes. En lugar de apoyar la decisión del propio Tribunal Supremo, que ya declaró la inconstitucionalidad del plazo poco antes de la aprobación de la ley, Mendes optó por crear una comisión de conciliación para debatir el tema. Con audiencias programadas hasta diciembre de 2024, la comisión -de la que se retiró el movimiento indígena- tiene trabajos programados hasta el 28 de febrero.

“Estamos cansados ​​de esperar a la Justicia y a los órganos competentes”, denuncia Nina Ava Guarani. “Porque nuestros derechos existen en la Constitución federal. Y frente a todo esto tenemos que afrontar toda esta situación. Tenemos que pasar por nuestros hijos que presencian cómo nuestros hogares son quemados por aquellos que se dicen buenos ciudadanos”, destaca.

“Pedimos que el MPI [Ministerio de Pueblos Indígenas], [la ministra] Sonia Guajajara entre a nuestro territorio. Para ver nuestro sufrimiento, para ver lo que realmente estamos pasando aquí. Necesitamos apoyo urgente”, advierte la dirigencia indígena. El informe solicitó un puesto a MPI, pero no hubo respuesta. Si hay devolución, el texto se actualizará.

Edición: Camila Salmazio

 

Fuente: abyayalasoberana.org

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