Segundo Villalobos, el principal sospechoso de planificar el crimen del defensor ambiental Quinto Inuma, permanecerá en prisión de manera preventiva por 18 meses mientras siguen las investigaciones.
El Primer Juzgado de Investigación Preparatoria Nacional dictó 18 meses de prisión preventiva al empresario maderero Segundo Villalobos Guevara, principal sospechoso del crimen del defensor ambiental Quinto Inuma.
Villalobos es acusado de ser el autor intelectual del asesinato de Inuma, quien luchó por la titulación y protección de su territorio contra la tala ilegal hasta que lo mataron en noviembre 2023.
Según la Fiscalía, Villalobos Guevara habría pagado S/ 1000 para que unos sicarios concreten el asesinato del líder kichwa de la comunidad nativa Santa Rosillo de Yanayacu, en la región San Martín.
De acuerdo con la defensa legal de Inuma, el acusado Villalobos no acreditó pruebas suficientes de su arraigo laboral y familiar y se contradijo al negar su vínculo con los otros acusados, pese a que uno de ellos lo delató.
Además de Villalobos, otras tres personas afrontan medidas por este caso: los hermanos Genix y Jerly Saboya Saboya, y Limber Ríos Ruiz, quienes fueron detenidos en febrero de este año y cumplen 18 meses de prisión preventiva.
Precisamente, fue Genix Saboya quien, tras ser detenido, confesó que mató al líder Quinto Inuma por encargo de Segundo Villalobos, quien le habría depositado S/ 1000 de los S/ 5000 que le prometió.
“Me dijo que me daría un dinero de recompensa porque él también quería matarlo hace tiempo”, contó Saboya en su declaración ante la Fiscalía que, posteriormente, encontró la constancia del depósito en el celular del sicario.
De acuerdo con El Foco que accedió a la confesión de Saboya, Inuma había denunciado a Villalobos por tala ilegal en el territorio de su comunidad Santa Rosillo de Yanayacu, lo que habría desencadenado este horrendo final.
Quinto Inuma fue asesinado el 29 de noviembre de 2023 cuando regresaba a su comunidad en Huimbayoc junto a su familia, después de participar en un encuentro de defensores ambientales en Pucallpa (Ucayali).
Su muerte se produjo pese a que venía denunciando amenazas durante seis años por denunciar la tala ilegal y el cultivo de coca en su comunidad y a pesar de ser reconocido como defensor por el Estado.
La familia de Inuma sigue preocupada por la falta de protección efectiva y continua por parte de las autoridades.
Por su parte, desde la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (Aidesep) exigen al Estado un proceso judicial sin demoras, para que se haga justicia de manera efectiva y evite que este crimen quede impune.
Fuente: servindi.org
