En el marco del «Operativo Roca», el Gobierno nacional ordenó la movilización de efectivos del Ejército y la Armada hacia la frontera norte para reforzar la vigilancia y el control. Esta medida, oficializada el 15 de abril mediante el Decreto 1112/2024 y amparada en la Ley de Defensa Nacional, permite que civiles sean detenidos de forma transitoria si cometen delitos en flagrancia.
El despliegue, que incluye a más de 10.000 efectivos del Ejército —de los cuales 1.300 permanecerán de manera permanente en zonas clave—, fue coordinado con Gendarmería Nacional. Según fuentes del Ministerio de Defensa, se emitieron órdenes de «empeñamiento» bajo estricta reserva para regular el accionar público de las tropas.
Para las tareas de vigilancia, se emplearán drones, radares móviles, helicópteros y un avión Diamond de reconocimiento. Las Fuerzas Armadas actuarán exclusivamente en áreas rurales alejadas de centros urbanos y pasos fronterizos oficiales, en función de obtener información estratégica para la defensa nacional.
El ministro de Defensa, Luis Petri, destacó que el operativo fue impulsado como un esfuerzo conjunto para fortalecer el control fronterizo, en coordinación con la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y el gobernador de Salta, Gustavo Sáenz.
Este despliegue se suma al avance del Plan Güemes, vigente desde el año pasado. En un acto realizado en el Escuadrón 52 “Tartagal” de Gendarmería Nacional, Bullrich sostuvo que las redes criminales serán desmanteladas una a una: «Vamos a liberar cada rincón que haya sido tomado por el narcotráfico», afirmó.
Además, se anunció que se implementará un sistema de cooperación con Bolivia para el intercambio de información en tiempo real sobre vuelos sospechosos. Según Bullrich, gracias a la tecnología, la cooperación internacional y la decisión política, el control total de las fronteras será recuperado.
Fuente: lv7.com.ar
